Así que para cumplir mis antojos, qué mejor lugar que Los Insurgentes, Pulques Finos en donde encuentro ambas bebidas, acordes a mis gustos, y de paso, me permití invitar a algunos amigos y a mis sobrinas "consentidas", María Fernanda y a Carmen, quienes me habían confesado que nunca habían visitado este singular recinto gastronómico, (pero que después de conocerlo, JURARON volver) y despedirme de la ciudad, rodeado de buena compañía y cocina mexicana.
Grata sorpresa resultó enterarnos que por "la temporada navideña" incluían en su menú los típicos Romeritos, y el Bacalao, que por supuesto no dejamos pasar, y que acompañamos con un "curado Los Insurgentes" que maridó a la perfección con los Romeritos.
Y siguiendo el tono de la plática y el compás que marcan los ¡salud! con el Mezcal de la Casa (espadín) seguimos con más botanas al centro de la mesa, hasta que llegamos a los Portobello con queso de Oaxaca y... ¡muy ricos!
En nuestra primera edición de este 2015, que en el mejor de los casos, "pinta" lleno de interrogantes, estaré publicando una conversación con el responsable de los "curados" que tanto gustan a los comensales.
Por lo pronto, lo invito a que cualquier medio día de este Enero, retome el gusto por nuestra milenaria bebida, el Pulque, en Los Insurgentes, enfrente del Metrobus Durango.
¡Salud y buen provecho!
Gabriel Mora y Romero
Director Editorial
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