Aviso IMPORTANTE, estimados amigos y anunciantes,
NO SE DEJEN SORPRENDER..!
Les recordamos que MESA y VINO
NO TIENE, NI HA TENIDO JAMÁS asociados ni representantes,
Los ignaros reporteros, decanos del lobby GAY de las secciones de SOCIALES y espectáculos, Enrique Montero que se hace llamar Castillo Pesado y su pareja Tony Scheffler,
JAMÁS han tenido que ver con MI EDITORIAL y sus publicaciones.
Tras 23 años de difundir la cultura de la gastronomía y el vino en México, he sido un testigo escrupuloso de los cambios que el tiempo, ha impuesto en esta "área" de la comunicación.
Me queda claro, que el nivel cultural de los que antes y también de los de ahora, -con las excepciones de toda regla- que se ocupan del tema, es prácticamente el mismo; en ese rubro, no veo cambio alguno, sigue siendo pobre.
Cuando leí una entrevista que le hicieron al crítico de gastronomía español Rafael García Santos en el que aseguraba categóricamente, que allá, los que escriben sobre cocina en la actualidad, "... son unos lameculos..", me quedé reflexionando acerca de...
Pero, ¿quiénes son los que "difunden" en México la cultura de la gastronomía y el vino? Además del de la letra, sólo encontré a uno, los demás... tan sólo anuncian, replican, repiten lo que les ordenan... -a cambio de una comida, una botella o la invitación a "un coctelito..."- sin parámetro ético alguno... en pocas palabras, no tiene opinión, ¿por qué?
Porque no tienen experiencia y por consecuencia, tampoco parámetros de comparación... para ellos, "todo es bueno"; al leer sus "crónicas", pareciera que no tienen capacidad de opinión, de pensar.
Pero lo que finalmente me llevó a desenfundar la pluma fuente y escribir al respecto, fue que uno de "ellos", -no sé quien es, no lo conozco- a través de las REDES, me tildó de "snob" cuando hice un comentario sobre algo que él había publicado...
Me pregunto, si sabrá el origen y el significado del término.
Seguramente no, porque LLAMAR A LAS COSAS POR SU NOMBRE... no es una cuestión de "snobismo", en el sentido que sea, y mucho menos en el que supongo, le da éste desconocido iletrado, y que me atrevo a asegurar, asocia con presunción y soberbia...
Todo comenzó, cuando leí en una publicación de esas que serían como el equivalente a la Televisa de la "disfunsión" gastronómica y de turismo que retozan en las REDES hoy en día ¡que da un gusto..! -o sea, mucho contenido basura, apto -como diría el "intermedio" de los Azcárraga: "...para jodidos.."- disculpen ustedes estimados lectores, pero no lo digo yo, sólo cito a quien lo dijo... y ya me dirán si se justifica o no la cita...
Y es que en una de las líneas del texto en cuestión, se leía:
"... desde el punto de vista vitivinícola, Guanjuato no le pide nada a Francia..."
¡No, bueno! no puedo dejar de expresar que eso ni siquiera es un despropósito... sino una ESTUPIDEZ, así, con mayúsculas...
Debo reconocer, que además de alguna tara mental, para asegurar lo anterior, se requiere audacia, temeridad envuelta en una enorme dosis de cinismo... de la ignorancia y la falta de... mejor ni hablamos...
De inmediato me trajo a la mente la novela del escritor ruso Dostoevsky que por esos días, estaba leyendo.
Me pregunto ¿cuánto les pagarían los de la pseudobodega de aquellos rumbos para que publicaran tal atropello a la inteligencia..? ¿qué clase de bufón, -por lego que sea en el tema-, podría afirmar y firmar, una sentencia de esa naturaleza?
Sólo un ignorante, o un cínico, o un idiota... no encuentro más que esas tres razones... y yo creo que éstos -quien lo escribió, quienes lo promovieron y quienes lo permitieron-, ¡son dueños de las tres..!
Así que volviendo al tema de inicio, supongo que para este ignaro, el "adjetivo" snob, es sinónimo de altanería y/o de una supuesta creencia de superioridad... -y me refiero a una falsa, a una simulada o ficticia, porque de "donde yo vengo" el conocimiento, sí que la da...
La verdad es, que el término en cuestión, no tiene nada que ver... así que voy a ilustrar a mis detractores:
SNOB: "...contractura de la expresión latina «sine nobilitate» que significaba, «sin nobleza»
Ortega y Gasset, -espero que éstos bufones, sepan quien fue Ortega y Gasset, -sé que es mucho pedir, pero...- ahora tal vez me critiquen porque estoy usando el singular y ellos piensen que se trata de dos personas (¿?)- da una breve explicación del uso de la palabra «snob» como contracción del término «sine nobilitate», explicando que: «..en Inglaterra las listas de vecinos indicaban junto a cada nombre el oficio y rango de la persona. Por eso, junto al nombre de los simples burgueses, aparecía la abreviatura: “s. nob.”, es decir, “sin nobleza”.
Este es el origen de la palabra “snob”.
Y esto, debido a mis constantes denuncias sobre la ignorancia, la improvisación en los comentarios, la falta de conocimientos y sobre todo de VERACIDAD en cuanto a los temas de la gastronomía y el vino, que "corren" hoy por hoy en los medio digitales y en los otros, con una cotidianidad, como la que imponen la manías...
Ya lo dijo el maestro Umberto Eco, "...las redes sociales les abrirán las puertas a una legión de idiotas.."
Como si el escribir -profesionalmente- no fuera un cometido responsable, una carrera... como si se tratara simplemente de un juego, como el de contar cuentos a los niños...
La transmisión de IDEAS, CONCEPTOS u OPINIONES -inteligentes, lógicos y críticos- a través de un texto, no es diversión, es un quehacer juicioso y consciente, que implica compromiso, pero sobre todo en éste tema en particular, ¡CULTURA..!
No basta con cubrir "un perfil" ad-hoc para anuncios y fotografías... -pura imagen- y dar catas con un guión previamente memorizado... como un disco rayado... para vender y vender y vender... y después: ¡a escribir..! sin importar su nivel socio cultural... al fin, la ignorancia en este país lo abarca todo...
Y entonces, nuevamente me pregunto acerca de éstos sujetos que "escriben" sobre el tema: ¿cuándo habrán tenido su primer contacto -serio- con el vino? ¿cuándo habrán "probado" por primera vez un sorbo de vino? ¿cuál fue la actitud cuando eso sucedió? ¿fue accidental? ¿hubo alguien que les diera aunque sea, la más elemental explicación? ¿cuánto han viajado? Si lo ha hecho, ¿adónde han ido? ¿a qué nivel?
Y así continúa la letanía de preguntas que me asaltan cada ocasión que me encuentro con algo "escrito" por estos bisoños, -jóvenes o viejos- que lanzan contenido basura sin ton ni...
Y esto, desde luego aplica para los caricatos reporteros de sociales y espectáculos, que eran los que en el pasado hablaban del tema... sí, esa pequeña recua de "burros" que apenas saben leer y escribir...
Y es por eso, que personas como mi querida amiga y eventual colaboradora, la inefable Cristina, -además de inspiración para un personaje de mis cuentos: "Sin Par... es" de la serie: Remembranzas de un paisaje perfumado...- graduada de la Ecole hôtelière de Lausanne hace muchos años, y profunda conocedora del tema, por toda una vida...
...más de cincuenta años viajando por el mundo entero -pagando sus cuentas, nunca ha aceptado invitaciones- con el único propósito de conocer más... sobre gastronomía, vinos, regiones, restaurantes, cultura, museos, hoteles, mercados, catedrales, sitios, personas... en fin, siguiendo la huella del legado de la inteligencia...- al leer un texto de una revista mexicana que por accidente cayó en sus manos, me pregunta con una nota alta de indignación envuelta en una capa delgada y transparente de sarcasmo: ¿desde cuándo estas prietitas nos van a venir a decir qué vino es bueno y cuál no? ¿para quién publican estas..?
Y antes de responder, de inmediato me viene a la mente lo dicho sobre contenidos como los de esas revistas basura... por el citado magnate de la TV mexicana con mote de felino; todo indica que, "...para los.."
Como siempre, les deseo muy buen apetito pero sobre todo, ¡mucha SALUD!
Gabriel Mora y Romero
Director General y Editorial Fin 1a. entrega
Apreciable Don Gabriel, con profunda tristeza tengo que coincidir en una gran cantidad de los conceptos y opiniones por usted vertidos en este suscitó artículo. El avasallamiento de la ignorancia es aplastante y con cierta desesperación e impotencia seguirá creciendo, ante la ausencia de verdaderos profesores.
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