Por Cristina Terrazas y Escandón*
Después de leer la primera entrega de esta serie que escribió mi amigo y editor Gabriel Mora y Romero, en cuyo texto me nombra -sí, soy su amiga Cristina- le pedí que me permitiera abonar en el tema para la segunda entrega, que por cierto, -él ya tenia escrita-, pero que gentilmente me cedió.
Después de leer la primera entrega de esta serie que escribió mi amigo y editor Gabriel Mora y Romero, en cuyo texto me nombra -sí, soy su amiga Cristina- le pedí que me permitiera abonar en el tema para la segunda entrega, que por cierto, -él ya tenia escrita-, pero que gentilmente me cedió.
Hace unos días leía un texto de Roser Torras, -que aunque ha tenido que ver con la selección del "ránking" engañoso, tramposo de la revista Restaurant, es sin duda, una connotada periodista gastrónomica hispana-, en el que mostraba su preocupación por quiénes serían el relevo de; "...ese puñado de periodistas dedicados en cuerpo y alma a la cocina y con un conocimiento del sector variado e inmenso... ¿cuál va a ser su relevo?", se preguntaba.
Da gusto enterarse que en países como España, hay preocupación por saber quiénes serán el relevo de los PROFESIONALES que todavía hoy, -y desde hace años- ejercen el periodismo crítico, objetivo, inteligente, -"pensante" dirían algunos de mis amigos-, sobre la actualidad, -de cada época- gastronómica en aquel país.
Aunque debo de reconocer que siento una envidia que no puedo disimular.
¿Cómo es posible que en un país como México, con una gastronomía ancestral, con una tradición de cultura espléndida, no contemos con profesionales en esos temas?
¿Cómo es posible que en un país como México, con una gastronomía ancestral, con una tradición de cultura espléndida, no contemos con profesionales en esos temas?
Porque escribir sobre este tema, ya lo dijo mi editor, no es un juego para foodies o tragones como se nombran así mismos algunos de est@s morenit@s retozones que deambulan entre catas y comidas, -con una sonrisa como las de los niños pobres cuando les regalan un caramelo- para ell@s, opíparas y espléndidamente novedosas, ya ve, estos bisoños son dueños de una proclividad desmesurada a ensalzar cualquier cosa por ruinosa que ésta sea.
La única respuesta que se me ocurre, al ver a esta fila de muchachos y también viejos, todos ellos improvisados y repetidores de lo que les ordenan los que los invitan, es aquella que dio un entrenador de la selección mexicana de futbol hace algunos años, cuándo le cuestionaron la pésima actuación del equipo y la mediocridad extrema y vergonzosa de sus jugadores, -aquellos célebres "ratones verdes", ¿los recuerda?
Dijo, con un expresión de sorpresa en el rostro y a modo de justificación:
"...¿que no se dan cuenta? ...son el producto de su entorno.."
Así que a diferencia de nuestra amiga española, mi preocupación al respecto aquí en México, es: ¿cuándo tendremos una puñado de PROFESIONALES dedicados al periodismo gastronómico serio, que no obedezca sólo intereses publicitarios mezquinos, faltos de ética, como lo hacen est@s..?
Pero no quiero ser injusta, no debemos culparlos del todo; no es su culpa no haber contado con unos padres que pusieran interés a su educación en estos temas... podría asegurar que estaban ocupados y sobre todo preocupados, en la búsqueda del sustento diario.
Otra razón de importancia que expone Toser Torras, obedece a la necesidad de dinero a los recursos económicos, fundamentales para conocer: cocinas, platillos, restaurantes, hoteles, países... en fin, todo lo que se requiere para ser dueño de un conocimiento más que aceptable, para que los parámetros que den estructura a sus juicios, sean firmes, sólidos... y que no se deslumbren con cualquier "mequetrefe" que se les ponga enfrente.
Y es que además de un conocimiento vasto y renovado constantemente, se requiere de mucha lectura, y repito e insisto, de los recursos económicos para viajar continuamente, visitar comedores, probar, probar, probar... y eso cuesta MUCHO dinero... y estos "chamac@s" parece que no lo tienen", así como tampoco los peleles de las crónicas de "inauguraciones de florerías.." como se refiere -desde luego mofándose mi amigo y editor Gabriel Mora y Romero-, a los fantoches lameculos de las secciones de sociales.
Ya ve, bien dice el refrán que: "Dios los hace y ellos se juntan.." pero ese tema de las morenit@s de las RP, se lo dejo a mi amigo Gabriel, que sin temor a equivocarme, lo tratará con regodeo, a través de su característica "filosa y aguda pluma".
*Cristina Terrazas y Escandón
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