La CANDELARIA, los Tamales y... el Vino mexicano, cree que se atrevan éstos...

De visita en la CDMX para celebrar la Fiesta de la Candelaria mañana domingo, que reúne a la familia alrededor de una variedad de tamales, que nada más de pensarlos se me derrite el gusto, -aunque las haya que se reúnan mejor en torno al televisor para ver el juego ese de orangutanes que nos envían las emisoras del vecino del norte-, me di una vuelta por uno de los grandes supermercados en donde conozco al responsable de los vinos...

Hoy tienen ofertas significativas, ya que me dice que no se vende; y del mexicano, ¿qué?

"El vino mexicano no lo quieren ni regalado..." me responde; me pregunto, ¿por qué será?

Los anaqueles llenos, los precios nos hablan de algunos chilenos de calidad dudosa (menos de $100.00), y los mexicanos, aun los que ni viñedos tienen, esos que compran los concentrados del Cono Sur; sí, leyó usted bien estimado lector, así como me cuentan que sirven los refrescos de cola en la clase económica de los aviones, que en el vaso se vierte primero un concentrado y después se rellena con agua, así  mismo le hacen en una "vitivinícola" mexicana; La Redonda de Querétaro y en  muchas otras partes, incluida desde luego, la península de Baja California... pero de ese tema le hablaré, con detalle, en la siguiente entrega.

De camino a casa, escucho en la radio "una ODA más" al vino mexicano en un comentario gastronómico de alguna de éstas jovencitas que apenas... y entonces, me preguntaba si dentro del delirio publicitario en que han caído nuestras morenit@s sommelliers (ahora ya se presentan como enólogas, ¿no es una maravilla de surrealismo nuestro país?) se atreverán a sugerirnos, a alzar sus "voces expertas" y dictaminar un "nuevo e infalible maridaje... con TAMALES..! sería lo único que faltaría dentro de esa corriente de locura, ávida de vender... lo que sea, ¿o no?

O alguno de esos nuevos cocineros que están "revolucionando la cocina", brincando de Oaxaca a Baja California y viceversa ó de Pachuca (en donde por cierto sólo tienen Barbacoa y Pastes, para ingresar al "selecto Club" que han formado los cocineros franceses que vinieron a México a "hacer la  América", y asegurarnos, -con ese tino infalible que se nota en su tono de voz; "verdad absoluta"- que no hay mejor opción que acompañar a uno de "Chipilín" -ya ve que están de moda ahora con el morenit@ de Palacio- con una copa de buen VINO MEXICANO... ¡bravo..!

Olvidemos el CHAMPURRADO, un buen ATOLE de guayaba, el Café de OLLA, y maridemos un "oaxaqueño", un "veracruzano de hoja santa" uno de "mole" ó uno "verde" ó uno de "rajas y queso", con... ¡VINO MEXICANO..!

Estimado lector, cree que se atrevan, ¿qué esta cuadrilla de morenit@s pisen esos páramos del descaro con tal de..?

¡Feliz Fiesta de la Candelaria... y mucha SALUD..!

Como siempre, les recuerdo que los decanos del Lobby GAY de cronistas de inauguraciones de florerías, Castillo Pesado y su parejita Tony Scheffler, JAMÄS han formado parte de mi Editorial -MESA y VINO! ni de sus publicaciones.

Gabriel Mora y Romero
Fundador y Director Genera/Editorial